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jueves, 20 de abril de 2023

Érase una vez en el reino del revés...

Educar en igualdad de oportunidades. No a los estereotipos de género.

La seño nos comparte el cuento que leyó en clase.

EL PRINCIPE CENICIENTO 

El príncipe Ceniciento no parecía un príncipe, porque era bajito, pecoso, sucio y delgado. 



Tenía tres hermanos grandullones y peludos que siempre se burlaban de él. 

Estaban siempre en la Disco Palacio con unas princesas que eran sus novias. 

Y el pobre Príncipe Ceniciento siempre en casa, limpia que te limpia lo que ellos ensuciaban. 

 - ¡Si pudiera ser fuerte y peludo como mis hermanos!

 – pensaba junto al fuego, cansado de trabajar.




 El sábado por la noche, mientras lavaba calcetines, un hada cochambrosa cayó por la chimenea. 



 - Se cumplirán todos tus deseos- dijo el hada. 

- Zis Zis Bum, Bic, Bac Boche, esta lata vacía será un coche. ¡Bif, baf bom, bo bo bas, a la discoteca irás! 

- ¡Esto no marcha! – dijo el hada. 

Había creado un coche de juguete diminuto, y el príncipe no se había movido de la cocina… 

- ¡Dedo de rata y ojo de tritón salvaje, que 9 tus harapos se conviertan en un traje! 

–grito el hada, pero solo consiguió un ridículo bañador de rayas para el príncipe. 

- Bueno…ahora cumpliré tu deseo más importante. ¡Serás fuerte y peludo a tope! 

Y vaya si era un Ceniciento grande y peludo: ¡se había convertido en un mono!

 - ¡Jolines! – dijo el hada-. 

Ha vuelto a fallar, pero estoy segura de que a medianoche se romperá el hechizo… 

Poco se imaginaba el Príncipe Ceniciento que era un mono grande y peludo por culpa de aquel error. 

¡Él se veía tan guapo! 

Y así fue corriendo a la discoteca. 

 El coche era muy pequeño, pero supo sacarle provecho. Pero al llegar a aquella disco de príncipes, ¡era tan grande que no pasaba por la puerta! Y decidió volver a casa en autobús. 

En la parada había una princesa muy guapa. 

- ¿A qué hora pasa el autobús?

 – gruñó, asustando a la princesa.

 Por suerte, dieron las doce y el Príncipe Ceniciento volvió a ser como antes. 

La princesa creyó que la había salvado ahuyentando a aquel mono peludo 

-¡Espera!

- gritó ella, pero el Príncipe Ceniciento era tan tímido que ya había echado a correr.

 ¡Hasta perdió los pantalones! Aquella Princesa resultó ser la rica y hermosa Princesa Lindapasta. 

Dictó una orden para encontrar al propietario de los pantalones. Príncipes de lejanas tierras intentaron ponérselos, pero los pantalones se retorcían y nadie lo conseguía. 

Como era 10 Preguntas clave: ¿Normalmente leemos cuentos como este?

 ¿Cómo son los cuentos tradicionales? de esperar, los hermanos del Príncipe Ceniciento se peleaban por probárselos ­ Que se los pruebe él, -ordenó la princesa, señalando al Príncipe Ceniciento - Este mequetrefe no podrá ponérselos- se burlaron sus hermanos… ¡pero lo consiguió! 

La Princesa Lindapasta se le declaró al punto. 

El Príncipe Ceniciento se casó con la Princesa Linda pasta y fueron ricos y felices por siempre jamás. 

 La Princesa Lindapasta habló con el hada de los tres peludo… y ésta los convirtió en hadas domésticas. 

Y en adelante, les tocó hacer las labores de la casa, por siempre jamás. 


* Autora: Babette Cole. 



Ahora vamos a crear nuestros propios cuentos no sexistas...

Recordamos características de los cuentos tradicionales y ahora vamos por más.

La seño nos comparte un poema que hoy inventó.


Los príncipes y princesas para mí...

  • Basta de princesas sumisas.
  • Princesas que limpian.
  • Princesas que se duermen.
  • Princesas que esperan...
  • Vamos por nuevas princesas, tal vez princesas que no tienen el cargo de princesas...
  • Princesas que luchan todos los días, que estudian, que trabajan,
  • princesas que cuidan a los hijos, nietos y / o sobrinos,
  • Princesas que eligen...
  • Princesas que escuchas y hablan, opinan, deciden, 
  • Princesas que dicen No.
  • Princesas que disfrutan, que se quejan, 
  • Princesas que dicen sí.
  • Princesas v príncipes diferentes...
  • Príncipes que ayudan, príncipes que lloran, principies que dicen la verdad.
  • Príncipes narigones, príncipes bajitos, gordos y con mucho sueño.
  • Príncipes glotones, sordos, ciegos, mudos y/o con uno o dos dientes manchados.
  • Príncipes de todo tipo...
  • Príncipes rubios, morenos, mestizos.
  • Príncipes que no son príncipes. 
  • Príncipes y princesas de todo tipo.


Autora Emilce Aragona

Edición seño Emilce.

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